miércoles, enero 07, 2009

Right to the very heart of it, New York, New York...


No te conozco y sí, porque aveces no entiendo cómo juega la vida. Te encuentro en el lugar menos indicado, cuando menos lo espero y cuando menos te busco. Tú estás con tu amigo, yo con mi amiga y tu amigo empieza la conversación con un pretexto tonto pero tierno. Se me van las horas y se me pasan las copas, a final de cuentas estoy en una ciudad nueva buscando ese no se qué que tanta falta me hace y que me hace dejar de contar los tragos. Tu amigo no encuentra señal adentro del bar, quiere apuntar en su iphone mi mail y sale, pidiéndome que lo acompañe. Afuera hace mucho frío pero todo el alcohol en mi sangre me ayuda a no congelarme. Tu amigo por fin encuentra señal en su iphone y me agrega al facebook mientras me abraza para quitarme el frio. Tú sales con mi amiga a buscarnos, no sé cuánto tiempo pasó pero sé que no fue mucho. Te despides, tu amigo también y me da un beso de esos que ni siquiera se pueden llamar besos, más bien un me dio gusto conocerte. Adiós, lo más probable es que no volvamos a vernos nunca...

La sorpresa es que al otro día me encuentro un mensaje en mi facebook de tu amigo. Se acordó de mi, yo me acuerdo de él a ratos, del beso que no fue beso, me duele la cabeza y no pienso y se me va la memoria. Tu amigo me dice después que va de vuelta a su ciudad y que no podrá regresar antes de que nosotros regresemos a la nuestra... Ni modo, pensé, y te agrego yo a mi lista de amigos. Tú sí andarás por la ciudad, quedas en llamarnos en cuanto puedas. A mi se me olvida hasta que veo un nuevo mensaje tuyo; si quieren nos vemos el lunes, sí, sí quiero.Y es así, te veo el lunes esperando en el mismo bar donde te conocí días atrás, no te lo digo pero me gusta cómo se te ve ese abrigo negro tan newyorkino. Te improvisas un tour, me invitas un té en Chinatown, nos paseas por el metro mientras me platicas de tus sueños todavía un poco de niño y yo te entiendo mejor de lo que crees, tu mirada me dice que quizá lo sabes. Quieres acercarte pero nos sobra mi amiga y tal vez nos sobra también tu amigo aunque esté a miles de millas de distancia. Y luego nos llevas a escondidas a la azotea del edificio donde trabajas, justo arriba de Grand Central Terminal, para que veamos las luces de Nueva York desde uno de sus rascacielos. El viento helado me pega en la cara y más que nunca me gustaría que estuviéramos solos para poder besarte como en las películas, y quizá en una de esas hasta empezaría a nevar y yo te diría que lo que acabas de hacer es lo más romántico que me ha pasado en la vida... Nos llevas a cenar, luego por unos tragos. Sonríes, yo también. Te conozco, sabes? de alguna otra parte. Tal vez fuiste el deseo que pedí al dar las doce cumplido a medias. Nos llevas al hotel y de camino, sacas al tema a tu amigo. Mi amiga dice que ella, esa noche en el bar, siempre pensó que eras tú el que habías querido besarme. Tú te sonrojas y mientes, dices que no, que sólo estabas siendo un buen amigo, y me preguntas que pasó en ese tiempo en el que tu amigo y yo estuvimos afuera. Nada, dije, el 'beso' que viste fue lo único que pasó. Te sorprendes, seguro pensaste que había habido más y por eso tu razón de guardar distancias... pero ya es demasiado tarde. Me abrazas, mi avión sale mañana y mi amiga no se nos despega. Adiós, ahora sí adiós. Te veo irte sabiendo que es probable que esa sea la última vez que te vea.

Adiós. Me llevo una de las mejores noches de mi vida, un momento como de película y un beso guardado que tenía tu nombre, al cual no se lo pienso cambiar nunca.

Esa noche, enredada entre las sábanas frías del hotel en Times Square, lloro un poquito de felicidad y un poquito de tristeza porque creo que jamás entenderé cómo funciona ese destino que se hace llamar para mi.

11 comentarios:

Ninja Peruano dijo...

Caray hermana, qué historia de amor tan más envidiable...

Esas son las historias que no cuentas en familia verdad?

Vain¡lla dijo...

Esas son las historias que aveces les disfrazo a la familia para poderme quedar con un poquito sólo para mi.
No son esas las historias que uno recuerda toda su vida...?

Kvvanchai dijo...

¡Wow, qué buena historia!

¡Qué bien que hayas encontrado parte de lo que hayas estado buscando!

¿El Destino? Es a donde habremos de llegar... El cómo es lo interesante...

Marlenne Magallanes dijo...

Aw se me hizo chiquito el corazón. No sé, todo puede pasar, yo lo tengo a kilómetros pero lo siento cerca, sé que en tu caso son más y más y más pero quien sabe... La vida gira y gira y gira...

Por lo pronto disfruta el recuerdo de la mejor noche de tu vida las noches que quieras...

Yana!!... dijo...

wooow que historia!!!
parece que lo de hoy son los amores a distancia, y vaya que funcionan
se feliz!! y sigue escribiendo asi =)

Said dijo...

"...sabes mejor que yo que hasta los huesos solo calan los besos que no has dado..."
-Joaquín

Vain¡lla dijo...

Qué chida frase!!! Me la voy a tatuar y será mi filosofía de vida de ahora en adelante.

Traumatismo dijo...

Muy buena historia, ya tenía muchísimo tiempo que no pasaba por aquí y por suerte encontré un post sumamente bueno.

Sé que a veces el destino no es del todo benevolente con las cosas que queremos para nosotros, pero quizá es sólo que te está preparando para lo que viene que será, si la suerte te sonríe, lo mejor de tu vida.

Te deseo que realmente sea así.

Un beso y un abrazo de feliz año nuevo.

Vain¡lla dijo...

Traumatismo: Muchas gracias! Ojalá sea como dices y nos vaya muy muy bien a todos, ya nos toca porque este año que caba de terminar estuvo bastante intensito...

Otro beso y abrazo, feliz 2009!

Mi Alter - Ego Super Espiritual dijo...

El amoe es asi, extraño ,pero hermoso.

Vain¡lla dijo...

y esporádico...